FIESTA DE CUASIMODO

Confesaré que no sé quién fue el tal Cuasimodo. Lo que sé es que en Tiabaya, encantador distrito arequipeño conocido por sus cebollas y ajos, se le rinde tremenda fiesta, relacionada con pascua de resurrección. La sorpresa me la di hoy, después de varias décadas de no pasar por allí en estas fechas. Nos recibió un par de kilómetros largos de camiones, la mayoría de carrocería reluciente que indicaban su reciente adquisición. En la plaza central de Tiabaya, correctamente uniformados, estaban cura y acólitos, expidiendo rápida y eficiente bendición a cada vehículo, no sólo camiones, sino ejemplares de toda marca y estado. El cepillo estratégicamente ubicado para acercarlo a la ventanilla del conductor para el óbolo correspondiente y sendos baldes con agua bendita para tan arduo trabajo. Algunos incluso abrían la tapa del motor para la respectiva admonición y los brochazos de agua bendecida humedecían los rostros de los felices choferes. La gente del pueblo, con ánimo y vestido de fiesta, se ordenaban frente a la iglesia principal para observar el acto sacro. Repito, no sé desde cuando se da esta tradición de bendición de vehículos, pero me parece una reminicencia de la famosísima bendición masiva que se realiza en el santuario de Copacabana en las orillas del lago Titicaca. Una muestra más de la deliciosa diversidad cultural de mi región.

Todas las fotografías: Jorge Bedregal La Vera

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