PROPAGANDA Y RELIGIÓN

Desde hace unas décadas se puede observar en las puertas de algunos hogares latinoamericanos el sendo cartelito que trata de disuadir a los propagandistas religiosos de acercarse con sus folletines y sus discursos apocalíticos a la puerta. El mensaje no puede ser más directo, "Este hogar es católico. No se acepta propagandas de otras religiones" y generalmente (como para darle más compromiso al asunto), se integra una imagen de la virgen María. Estos cartelitos se hicieron muy populares cuando las diferentes iglesias cristianas o mormonas empezaron a usar como un discutible método de propaganda, la visita (usualmente los fines de semana y a horas incómodas) de una pareja de predicadores quienes con insistencia y postura de saber la verdad de todo, más o menos exigen que la persona que tuvo la mala suerte de abrir la puerta escuche sus alucinadas predicciones sobre el fin del mundo y las desgracias que les tocará a quienes no escucharon el mensaje. Pochi Marambio, un destacado músico peruano, junto con su ecléctico grupo Tierra Sur perpetró una muy divertida propuesta musical que giraba alrededor de estos molestos e indeseados visitantes. Igualmente, un ateo norteamericano decide darles una sope de su mismo chocolate a los píos integrantes de la comunidad mormona en Salt Lake City, Utah. El resultado no puede ser más hilarante. Con este post no quiero ofender a ningún lector que comulgue con cualquier confesión religiosa, sólo hago patente mi cerrada defensa del descanso de mis sábados o domingos por la mañana.



Pochi Marambio y su hilarante "Llaman a la puerta"-



Un ateo haciendo propaganda religiosa entre predicadores, con el libro del profeta Darwin en la mano.